Lo que aspiramos: por Rafael “Negro” Blanco

La política para nosotros en Unión y Progreso no es más que un instrumento de lucha en la búsqueda del bien común, así nos lo ha  expresado reiteradamente nuestro líder fundador Eduardo Fernández.

Surgimos como un movimiento político abierto a la participación libre de los ciudadanos en general desde el tercer trimestre del año 2020, pletóricos de sueños y emociones, desprendidos de mezquindades, egoísmos y sectarismos.

Nos acercamos afectuosamente a todos aquellos integrantes de la sociedad civil que no cesan en el propósito de producir un cambio del gobierno venezolano en paz, sin invasiones ni violencia, así como a aquellos que al igual que nosotros fueron despojados de sus tradicionales tarjetas partidistas y también a quienes tienen años intentando legalizar ante el CNE sus movimientos politicos sin éxito alguno, a nuestros vecinos en general y así sin mayor organización ni concierto alguno, sin recursos financieros,  armados sólo con nuestra fe y la firme convicción de defensa del voto,  conscientes como estamos de que es el único mecanismo idóneo para la toma de decisiones ciudadanas, nos involucramos entonces en las parlamentarias pasadas logrando alcanzar el respaldo electoral suficiente para ser hoy un Movimiento con M mayúscula y con tarjeta electoral propia, la de la “U”.

Algunos egoístas no alcanzan a visualizar la potencialidad de nuestro movimiento y  se refieren a UNIÓN Y PROGRESO por los  resultados electorales obtenidos de las elecciones parlamentarias pasadas, siendo esa la fotografía de un momento político extinto, cuyo valor estadístico no pondera la realidad actual ni la emocionalidad electoral de una elección regional y municipal, sin lograr comprender además que ahora con más tiempo para organizarnos estamos destinados a crecer exponencialmente, con el concurso de la voluntad de cambio de los venezolanos.

Actúan de mala fe, con el inexplicable objetivo de estimular la abstención y facilitar así la reelección segura de las actuales autoridades regionales y municipales que nos mal gobiernan a lo largo y ancho de Venezuela. Ya a muchos de esos tarifados les han endilgado el epíteto de enchufados. Enchufados unos en el madurismo y  enchufados otros en el llamado gobierno interino.

No lograrán en esta oportunidad inducir al venezolano por el camino de la abstención porque en él subyace el más grande y sincero deseo de cambio y tampoco podrían los enchufados de Carabobo con sus simplistas esquelas desacreditar la participación de Unión Progreso Carabobo de ninguna manera porque aquí nos anima un espíritu de lucha por la democracia, por la libertad y por el respeto a los derechos humanos, un espíritu de lucha influido:

-por la justicia social y la igualdad de oportunidades para todos.

-por el desarrollo económico, con empleos modernos, productivos, estables y bien remunerados.

-por la defensa del salario de los trabajadores y del ingreso familiar de todos.

-por el rescate de la dignidad y la utilidad de la política para que todas y cada una de las familias venezolanas puedan vivir bien.

-por la defensa de los principios éticos y de los valores morales.

-por la felicidad y la alegría de todos los venezolanos.

Así textualmente nos lo ha inculcado nuestro líder fundador Eduardo Fernández, convencidos como estamos de que con el concurso de todos podemos construir una Venezuela mejor.