Exterminar al chavismo por Gonzalo Martín

Ya se ha dicho en varias oportunidades que de darse una transición, el chavismo que no esté involucrado en delitos contra los DDHH podrá participar en ese gobierno.

El mismo Presidente Guaidó lo ha mencionado y recientemente lo hizo Leopoldo López en su primera presentación pública en Madrid luego de su escape.

Los mismos que han asomado la posibilidad de participación roja en un gobierno de transición, también han dicho que se perseguirá implacablemente a todo aquel que haya asesinado, perseguido, torturado y desaparecido personas en Venezuela; o sea, que hayan cometido delitos de lesa humanidad.

O sea, para mí está muy claro.

“Si cometiste delito, no te vistas que no vas”

Sin embargo, si lo que han hecho es ser parte de la comparsa corrupta del régimen, quizás puedan continuar en la actividad política nacional.

No es difícil de comprender.

Ahora bien, ¿Eso es lo deseable desde el punto de vista de la justicia?

Sabemos que no, un rotundo no.

Pero olvidar que existe una importante presencia del pensamiento chavista en la población es absurdo y además, hasta irracional.

Entonces, excluir al chavista simplemente por qué “tú” consideras que se equivocó votando por los rojos es cuando comienzas a comportarte exactamente igual al chavismo que ignoró al pueblo opositor.

Repito: te comportas como lo que criticas.

Aceptar a chavistas en un gobierno de transición, pienso yo, bajaría las pasiones y promovería la paz.

¿Acaso se les olvidó lo que sucedió con el “Carmonazo”?

Luego de esa extraordinaria manifestación del 11/04/02, de la masacre promovida desde el poder y la entrega voluntaria de un asustado Chávez en Fuerte Tiuna, vino Pedro Carmona apoyado y puesto allí por factores de poder (ustedes saben, “el que entendió…”) y con un decreto borró de un solo guamazo lo que mucha gente consideró una reivindicación promovida por el mismo Hugo y una cachetada hacia ellos, o sea ¡la excusa perfecta!

Hagan memoria, hasta justo antes que “Pedro El Breve” se lanzara con su decreto, realmente nadie había salido a defender al gobierno.

Entonces… ¿Se va a cometer el mismo error? ¿Se van a alborotar a los demonios?

Dejen que los rojos se caigan por su propio peso, por su propia ineficacia y corrupción, entendiendo que los violentos y asesinos si pagarán por sus delitos.

Leopoldo López, por cierto, con el que en lo personal no he simpatizado mucho, ya lo dijo: “Con Maduro no se puede negociar”

Entonces hay que deshojar la margarita… violadores de DDHH no estarían en un gobierno de transición y de haber negociación deberá serlo con aquellos que le quiten piso “político” a Maduro y a sus secuaces y a ellos se les permitirá seguir participando en política.

Sin embargo, siempre está el escandaloso grupito que pide exterminar al chavismo, borrarlo, desaparecerlo.

Y eso, mis estimados, no se hace de manera instantánea ni por decreto.

Los absurdos piensan que por gritar en tuiter y recibir unos cientos de RT ya tienen la razón y es que además, por lo general, son los primeros en correr a esconderse cuando “la cosa se pone fea”.

Lo que realmente necesitamos es que el chavismo salga del poder ¡ya! y como los marines no parecen querer venir, solo nos queda la movilización interna, la presión social y la política.

Y si alguien tiene una mejor idea, que venga y la ponga en práctica.

Allí les dejo eso!